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La sandíaSafe Creative #1302014519271

Citrullus lanatus de la familia de las cucurbitáceas.

Planta de origen africano y conocida en el área mediterránea desde la antigüedad.

En nuestras latitudes es una planta anual de ciclo de cultivo de primavera-verano.

La sandía se produce para obtener su fruto, que es redondo. Exteriormente, su color es verde uniforme o a franjas más claras, blancas o amarillas. Su pulpa es rosada o rojiza y, también, puede ser amarilla. La planta es de porte rastrero y puede trepar si encuentra un soporte.

Producen flores masculinas y femeninas por separado, por lo que es normal que de algunas flores no se produzcan frutos (las masculinas).

Marco de plantación: habitualmente se planta a una distancia entre 0,5 y 1 m y pasillos entre líneas de 1,5 a 2 m.

 

Marco plantacion sandia

 

Temperatura: la sandía es muy exigente en lo que a temperatura se refiere. Pasa lo mismo con el melón. La temperatura mínima de supervivencia es de 0º. El cultivo en invernadero permite avanzar la entrada en producción y alargarla. La protección al aire libre mediante pequeños túneles y acolchados también es práctica habitual.

 

Termometro_rojo

30-45º

No hay crecimiento

Termometro_verde

20-30º

Crecimiento óptimo

Termometro_marron

15-20º 

Crecimiento aceptable

Termometro_azul

0-15º (<0º muerte planta)

No hay crecimiento.

 

Suelo poco exigente
Suelo suelto y bien aireado y que no se estanque el agua; rico en materia orgánica y de pH óptimo entre 6-7,5.
Abonado exigente
Abonado rico en potasio.
Muy soleado
Riego exigente

Riego regular y abundante en plena producción. 

Calendario de trasplante y recolección. La sandía es una planta que marca su momento de trasplante en la época libre de heladas. Según sea nuestra zona de cultivo y dependiendo del momento en que estemos (en época libre de heladas o de menor riesgo) podremos hacer el trasplante. Se puede plantar conjuntamente con el melón y después del tomate.

 

 

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M

A

M

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J

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TRASPLANTE

       Trasplante  Trasplante  Trasplante            

RECOLECCIÓN

            Recoleccion  Recoleccion  Recoleccion       

 

Variedades:

Sandía Crimson sweet. Sandía de pulpa roja y piel verde a franjas blanquecinas.

Sandía negra. Sandía de pulpa roja y piel verde oscuro.

Labores de cultivo específicas:

ACOLCHADO. El acolchamiento del suelo consiste en cubrir total o parcialmente el suelo de cultivo con una lámina de plástico opaca o con una capa de material orgánico, como por ejemplo la paja. Con este sistema se consigue un tipo de efecto invernadero más localizado en la zona radicular, que permite un mayor desarrollo de la planta y a la vez evita la aparición de malas hierbas. Un tercer efecto positivo que se deriva de esta operación es el mejor aprovechamiento del agua, ya que evita, en gran medida, su evaporación. En el acolchamiento del suelo es aconsejable la instalación de un riego localizado por goteo por debajo del acolchado para que el acceso al agua de las plantas no sea limitado. En el caso de la sandía, facilita mucho el trabajo contra las malas hierbas y evita los excesos de humedad que pueden afectar al fruto, ya que este se apoya en el suelo.

Consejos para cultivo fuera suelo: al ser una planta rastrera, se debe plantar en los laterales de las mesas de cultivo y que las plantas caigan por fuera. En el caso de tener poco espacio, no es una planta recomendada, ya que ocupa mucha superficie.

En cultivo fuera suelo es muy importante mantener las plantas fertilizadas durante todo el ciclo de cultivo, ya que los riegos son constantes y lavan el suelo de nutrientes. Por eso, es necesario ir aportándolos mientras dure el cultivo.

Los riegos tienen que ser muy regulares y no permitir nunca que el sustrato se seque en exceso.

Un buen substrato es el mejor secreto del éxito.

 

PLAGAS:

Insectos devoradores de hojas y frutos: diferentes insectos parecidos a las mariquitas pueden roer el envés de las hojas o hacerles agujeros. También son frecuentes diferentes orugas comedoras de hojas.

Insectos minadores de hojas: Lyriomiza sp. Pequeña oruga que crea galerías en las hojas entre las dos epidermis.

Mosca blanca: insecto volador de color blanco y de pequeño tamaño que chupa la savia de las hojas y crea una película sucia sobre ellas (negrilla).

Pulgón: insecto con aspecto de rombo que succiona savia de la planta.

Ácaros: la araña roja (Tetranychus cinnabarinnus) produce el amarilleamiento de las hojas basales de la planta y crea colonias rojizas del ácaro en el envés de las hojas.

Insectos de suelo: los gusanos grises (Agrotis sp) devoran la base del tallo de la planta y  los gusanos de alambre (Agriotes sp.) atacan las raíces del tomate.

Nematodos: generalmente Meloidogyne sp. pero también Ditylenchus dipsaci que producen enanismos, amarilleamiento y finalmente marchitamiento. Se observan quistes y ensanchamientos en las raíces.

Caracoles y babosas. Hay que tener especial atención en los días posteriores al trasplante.

 

ENFERMEDADES:

Hongos de suelo y basculares: Fusarium oxysporum y Verticillium sp. destruyen los vasos conductores de la planta, por lo que sus efectos son, primero un amarilleamiento y, después, flacidez de las hojas, como si le faltase agua. Un corte transversal del tallo nos revela un oscurecimiento de los vasos. También son frecuentes podredumbres del cuello de la raíz.

Mildiu: Pseudoperonospora cubensis. Se inicia con una mancha angulosa amarillenta en los márgenes de las hojas que se extiende y que finalmente produce el amarronamiento y la sequedad de las zonas afectadas. Las hojas se repliegan formando una copa.

Oídio: Erysiphe sp. y Sphaertheca fuligine. Producen manchas amarillas en hojas y en el envés se aprecia un vello blanco característico.

Podredumbre gris: Botrytis cinerea. Frecuente en cultivo bajo plástico, produce un moho gris en hojas, tallos y frutos.

Virus: Producen brotes jóvenes amarillentos, deformados y pequeños, además de coloraciones extrañas en las hojas.

FISIOPATÍAS:

Golpes de sol, asoleamiento: debido a un exceso de radiación en la cara más expuesta del fruto, se produce un acorchamiento de la piel que deprecia el fruto.